¿Por qué se le teme tanto a la verdad? ¿Puede lacerar nuestros sentimientos, nuestro corazón, nuestra mente, o nuestra fe? Pero sabemos, que nada puede estar oculto para siempre, muchas veces sabemos de ella, y cerramos nuestros sentidos, para no ver la realidad.
La verdad del Vaticano, y sus defensores, cuántos secretos tras sus majestuosas paredes, cuántos testigos mudos de hechos que no son para nada nuevos, sabemos muy dentro de nosotros se han suscitado siglos tras siglos, y que sólo pensarlo, nos produce un amargo sabor, y preferimos tapar el sol con la mano, y hacernos los sordos y los ciegos.
Investigaciones hechas por personas, y de fuentes fidedignas, han podido descubrir, todo un sistema muy bien planificado, estructurado del mundo Vaticano, ¿para qué, o para quién? quizás muchos por temor se abstienen de plantear la situación,
Algunos de los hechos, se llegan a saber, porque siempre alguien hablará, y no porque El Vaticano, aún sabiendo lo que está ocurriendo guardará silencio, si así, lo hacen los demás, y seguir ocultando la verdad. "La granada parece haber explotado"muchos se han atrevido hablar, y ante tan claras evidencias, todavía "El Imperio"quiere seguir dando excusas, seguir escudándose tras su jerarquía.
Pensar que aquellos que dicen, consagrarse a Dios, para servirle, con honestidad y pureza, dentro de ellos viva la más vil de las aberraciones, tomar la inocencia de un niño, para satisfacer sus más bajos instintos, pensarán en Dios al estar consumando el hecho, o después se darán golpes de pecho.
En declaraciones emitidas, por el Cardenal jubilado, Darío Castrillón en la cadena CNN en español, y con todo el respeto que se merece, por su jerarquía y edad, creo que quedó atrapado en el laberinto de sus palabras, al decir en la misma, "no podemos darnos golpe de pecho, en el pecho de los demás" ,entonces me pregunto ¿donde dieron los golpes los seudo? Dijeron, “por mi culpa”, “por mi culpa”, “por mi culpa”, o pusieron su puño el los pechos de los niños, y dijeron: “por tu culpa”, “por tu culpa”, “por tu culpa”.
Muchas veces los seres humanos, no importa su posición, o que tan inteligentes puedan ser, pero se tiene que saber, cómo, y qué, vas a defender, dijo: la santa sede está haciendo lo que tiene que hacer, (de que forma),”no acepto la hipocresía de los millones de hombres que han cometido esos, y peores hechos con los niños”…!alooo... de que está hablando!, justificar los hechos que, aunque sean los mismos, pero no para ellos, que son servidores de Dios, que están ahí para eso, dar el ejemplo, y aunque tengamos que aceptar, que todos somos seres humanos, y tenemos debilidades, ¿Por qué los niños? ¿Cómo interpretan las palabras de Jesús? ¡dejad que los niños vengan a mi! Que hay abogados, deportistas, homosexuales ¡bueno, y eso quien no lo sabe! dentro ellos también, han salido del closet. ¡Que hay madres que sacan de su vientre a sus hijos de 8 meses es cierto... Imperdonable!
Pero me sigue sonando a justificación, ¿no es de suponer que, por su investidura deben estar por encima de las debilidades del mundo y la carne, para ser merecedores de esa posición? "que ellos tienen su propia ley, y la forma de actuar de los obispos," también se sabe, (el hermetismo del imperio) "y que de acuerdo a ella, no se puede castigar sin seguir los derechos y haber testigos"(que mejores testigos que los niños), para terminar el extracto de la entrevista, que seria importante verla, y poder captar la esencia de la misma, ante la última pregunta de la periodista, en el caso Masiel, donde hubo pruebas murió, y nunca llegó a lo judicial quedo en dos y tres, y se abstuvo de responder, y reiterando nuevamente mis respetos, mejor que guardó silencio. (”De haber hablado me he arrepentido muchas veces, de haber callado nunca”).
Cuantos no quieren creer, y se rebelan aceptar que la iglesia se está desmoronando, ellos mismos no saben que hacer, qué se puede esperar, si bien es cierto no son todos, pero como se dice, pagan justos por pecadores, como saber que estás frente a un hombre de Dios, para que te de un consejo, o consuelo y bajo la sotana, la realidad es otra, cómo sentarte frente a un hombre a confesarte, y que te diga, “tus pecados están perdonados”, cuando es igual, o peor que tú, duela a quien le duela pero esa es, la triste verdad.
¿Qué nos queda? ¿En quién, y en qué creer? Aunque la carrera sacerdotal, no parece fácil, no todos llegan a ella, por verdadera vocación, aunque después de pasar por el pesado aprendizaje, la vida para ellos aunque con sus limitaciones, (para algunos, ya sabemos, no para todos), llega a ser bastante cómoda, sin criticar, ni censurar, alguien, lo tiene que hacer, pero no cubrirse con la sotana para cometer el más cruel de los actos. Esto, sin contar, los que no han salido a la luz pública, podemos pensar cuantos, pero cuantos niños, por miedo, temor, quedaron callados por el resto de su vida.
Quizás, algún día no muy lejano, las leyes del imperio puedan cambiar, lugar que creo, no impera la voluntad de Dios, si no, la de los hombres. No por ser mujer, pero pienso, porqué sólo ha sido potestad del hombre, ocupar ese lugar, porqué no terminar ya, con patrones absurdos, al seguir con dichas leyes, que no están acorde, con el mundo actual, permitir como lo más normal del mundo, casarse, desde el sacerdote, hasta el papa,(que cada cual decida que posición tomar) tener una familia, ”siempre he entendido, y así quiero seguir entendiéndolo, que el amor no es pecado” convivir en pareja para tener verdadero conocimiento, una base al dar un consejo de lo que es, en un momento dado lidiar con un hijo, esposo, esposa, el estar casado@, no impide, servir y amar a Dios, a lo mejor así, y para no tener que seguir justificando, lo injustificable, quien sabe, entre los sacerdotes terminen los abusos.
Hasta cuando queremos seguir ignorando la verdad, cuánto tiempo más tendremos que esperar, para traspasar la pared ¡El Vaticano, cuántos misterios, cuántas mentiras!
