Un refrán muy viejo que todos conocemos que dice:”El Amor es Ciego” que tiene mucho de cierto, ya que se ve a la pareja de la cual se está enamorado@, con todas las cualidades habidas y por haber, y si algún defecto le llegas a ver,dirás y pensarás, que contigo, lo va ha cambiar, algo que no puede ser más falso, sólo para quien se quiere engañar, y el enamoramiento los@ ciega.
La personalidad del ser humano, al igual que el compartimiento de los animales, no se cambia así por así, todo ser humano que vivió, creció en un ambiente de agresividad, casi todos lo serán,o quizás de por si, tengan mal carácter y eso, no se puede cambiar, pueden disimularlo, aguantarlo en un momento dado, pero erradicarlo jamás.
Infinidades de parejas viven esa triste realidad, por mayoría la sufre la mujer, y por regular la que acude a la autoridad por maltrato familiar, son las más humildes y de bajo recursos, las que están ubicadas en otra posición no lo hacen por pena, por vergüenza, pero al igual, ya sea para una o para otras, la mayoría de las veces,para no decirlas todas, esa autoridad que debe velar por la vida e integridad, no hacen nada, hasta cuando se desencadena una desgracia,y es cuando entonces, van a buscar al culpable, pero mientras tanto, ya la mujer está muerta, o con múltiples golpes o heridas.
Pero tampoco podemos excluir a la familia que los rodea, muchas veces esa mujer pide ¡auxilio! de diferentes formas y maneras y le hacen caso omiso, el resultado llega a ser el mismo, independientemente que no se llegue al extremo de la muerte, igual o peor es el maltrato físico y sicológico, y eso que suponemos, creemos empezó por amor, termina siendo una batalla campal.
No existe excusa para aceptar el maltrato, ya sea a la mujer,o al hombre (también hay mujeres agresivas), hay diferentes formas y maneras de resolver esa traumática situación, y sólo la podrá tomar, la que todavía está sana, ya que de prolongar la convivencia, también terminará enferma, pero tristemente en la mayoría de veces,"ese amor ciego" no te deja ver. Rompe con el patrón, ya que de existir hijos lo más seguro es, que seguirá la cadena, de igual manera, tienes el derecho y la obligación, de darte tu lugar, defender tu vida y dignidad... El amor no tiene porque ser ciego.
