Cuando en abril pasado surgieron como surgen esporádicamente los hechos que siempre la iglesia a tratado de ocultar, nunca pensé que en tan corto tiempo se trajera otra vez a la luz pública, y que esto pueda servir para que de una vez por todas lograr descorrer el telón de los miles, y miles de abusos cometidos por los sacerdotes pederastas.
La verdad en
el Vaticano."La granada parece haber explotado" muchos se han atrevido hablar, y ante tan claras evidencias, todavía "El Imperio" quiere seguir dando excusas, seguir escudándose tras su jerarquía, luchan por mantener sus leyes y normas, tratan de evitar que,"sus hermanos sean castigados con todo el peso que sus actos ameritan", se rebelan a tomar las medidas correctas, necesarias enérgicas para erradicar por completo dichos abusos; La prueba está en las nuevas normas donde se dice, tomarán nuevas medidas pero, establecen, o corroboran el Secreto Pontificio; Cuanta demagogia.
Una de las leyes establecida por
El Vaticano, (para mi absurda), "pecado mortal, que una mujer se pueda ordenar como sacerdote, oficiar misa, es un delito grave contra la
fe" es verdaderamente inverosímil que la misma iglesia discrimina a la mujer ¿por qué? y dice: "Serán enjuiciados por los tribunales de la Congregación para la Doctrina de la Fe,los que congreguen a mujeres" en cambio a los abusadores por décadas, son trasladados de iglesia en iglesia de congregación a congregación, para encubrir dicha falta, y me pregunto ¿dónde está esa
fe de la cual profesan?
Fomentar ciertas situaciones para poder encubrirse unos a otros, algunos de los que adentro están han querido hablar, otros son ex sacerdotes, y han tenido que callar. Saber que están mintiendo Curas, Obispos, Cardenales, Papas. Habría que preguntarse ¿cómo se presentan ante Dios a la hora de confesarse? "cuánto ayuno harán, cuántos azotes se darán" y todavía hay
defensores quienes dicen, que a la iglesia se le quiere desacreditar.
Refiriéndome a las entrevistas en CNN, ¿qué sabia el papa? (!para mi,todo!) se haría largo analizar las opiniones de cada uno, pero los reportajes donde se pudieron ver y oír las declaraciones de algunos de los abusados sexualmente, lo dice todo, palpar la impotencia, la frustración de no poder haber hecho nada en su momento, el trauma para toda la vida que todo el dinero del mundo, no puede subsanar.
Es muy fácil para aquellos, que no les haya tocado en carne propia, pensar que eso, no ha sido nada, pero también habemos los que, sin haber vivido ese dolor, ese trauma, no es difícil imaginar lo que ellos pueden sentir.
En la segunda parte de la entrevista, donde hubo buenos planteamientos, me llamó la atención la de obispo del Perú, Luis Bambarén, que me dio la impresión no fue bien comprendido ya que, en la mayoría de su intervención, su posición fue tajante, al dejar plasmada su opinión, "todos los abusos se deben divulgar, juzgar y castigar"que es como siempre debió y debe ser. ("La mujer del César, no sólo debe ser honesta, si no también parecerlo").
También se plantío el hecho si los homosexuales se pueden ordenar coincidieron que si, difiero de ese punto, estoy de acuerdo a la no discriminación, ¿pero no es precisamente de eso,de lo que hablamos ? depurar el entorno de los niños de efectos nocivos, no sería obvio pensar, ¿que hace un sediento ante un vaso de agua? Pienso; Si ordenar a un homosexual, no va contra la
fe, porque ordenar a una mujer, si lo puede ser.
En la última entrevista, el padre Muñoz Mora, declara que,"éste es un tema nuevo" !nuevo! nuevo porque no lo quieren exponer, pero de que existe, existe, "que todos los pederastas no son iguales, y no se les debe juzgar igual, depende de cuantas veces lo hacen" (no encuentro palabras, y si las encuentro, no las puedo decir, lo dejo así) quiero pensar que a comenzado a salirse de las manos la situación ¿estará ante la puerta, el final del clan?
Es triste expresarse así para los millones de seres en el mundo que creemos en la iglesia, que habría que aclarar, no es precisamente en si, la institución, si no los hombres que la gobiernan, por eso es más triste seguir aceptando, lo que por siglos tras los muros silenciosos, "esos hombres" se han valido del poder, y esos
niños, ahora adultos ,vivieron la etapa más triste de su existencia.
No se hasta que punto se puede culpar al padre de familia, si bien es cierto que su deber es orientarlos sexualmente, lastimosamente, todavía existen padres, que les avergüenza hablar esos temas con sus hijos, y que años atrás, menos se hablaba de ello, pero independientemente, los padres que ingresan a sus hijos en esa clase de colegios, se supone lo hacen creyendo en una mejor educación, formación, nunca pensando que serán abusados.
Quiero creer que en esta oportunidad, las cartas están echadas, y las evidencias claras, no dejarlo así, unirse más medios, más organizaciones no para terminar con
El Vaticano, pero sí, con flagelo.
Sólo nos queda elevar una plegaria, si en verdad existe alguien quien la escuche, les de entendimiento, sabiduría y temor de Dios, ese Dios en que todos queremos creer, para no perder la
fe.
Y no debemos nunca olvidar, que todo el mal que se hace,de alguna manera se pagará